Los organizadores del Rally de Australia se vieron obligados a recortar fuertemente el recorrido de la prueba, debido a los problemas con los incendios. Los graves incendios en la zona de Queensland tienen cortados muchos de los caminos del rally, así como las rutas de acceso.
La decisión que tomó la organización fue reducir el número de especiales a disputar, eligiendo cuatro de ellas: la Súper Especial -Destination NSW- de 2,4 kilómetros, junto a Raleigh (3,1 km), Graces (8,6 km) y Allens (8,7 km), que se repetirán en varias ocasiones. Estas dos últimas son parte de la especial de Argent Hills, la más al sur, en sus dos sentidos.
Así, el viernes la etapa no llegará a los 20 kilómetros cronometrados en total, con tres pasadas por la Súper Especial y cuatro por Raleigh. Para el sábado queda el grueso de la prueba con poco más de 63 kilómetros, que completarán otras dos pasadas por la Súper Especial, más tres pasadas por Graces y Allens y dos por Raleigh.
Para el domingo, la Súper Especial completará dos pasadas más, para siete totales, junto a dos por Raleigh para poco más de 11 kilómetros cronometrados.
En la nota emitida por la organización se pide a los equipos que extremen sus precauciones, evitando estacionar los autos en zonas de pasto –los catalizadores son muy peligrosos–, evitando trabajar con herramientas o materiales que puedan generar chispas fuera de los lugares habilitados para ello y que se abstengan de fumar en los enlaces, tramos y en los reconocimientos que se realizarán el miércoles.
El itinerario definitivo debe ser ratificado por el Gobierno de Nueva Gales del Sur y la FIA, en una fecha que está en juego el título de constructores entre Hyundai y Toyota. Con este kilometraje, salvo que la FIA decida lo contrario, la prueba sólo puntuaría a la mitad en el cierre de la temporada.
S.B