Valentino Rossi fue dado de alta este sábado, luego de la operación a la que fue sometido la madrugada del viernes. El piloto italiano se encontraba internado en el Hospital Riuniti, en Ancona, donde ingresó el jueves a última hora al sufrir un accidente esa misma tarde, mientras practicaba enduro, y donde el doctor Raffaele Pascarella le colocó un clavo intramedular para reducirle la doble fractura de tibia y peroné que padeció.
Si bien los doctores establecieron un tiempo de reposo de entre 30 y 40 días, Rossi dejó en claro al salir del hospital que esperará a ver cómo reacciona su cuerpo antes de tomar cualquier decisión, una medida de precaución lógica si tenemos en cuenta que ya ha cumplido los 38 años. «Pasé bien la noche, dormí y esta mañana me encontré bien. Me visitaron los doctores y me dieron el OK para irme a casa, donde todavía podré descansar mejor», aseguró el piloto de Tavullia.
«Empezaré la rehabilitación lo antes posible y esperaré a ver cómo reacciona mi cuerpo antes de tomar cualquier decisión. Como dije ayer (por el viernes) haré todo lo que pueda para volver a correr lo antes posible», agregó Il Dottore, que con toda seguridad se perderá las dos próximas carreras del MotoGP, en Misano, la semana que viene, y en Aragón, el próximo día 24 de septiembre.
Ahora habrá que ver qué decisión toma Yamaha acerca de su reemplazante en esas citas y si Rossi volverá en alguna de las tres fechas que conforman el triplete asiático del calendario o si lo hará en la última parada del calendario, en Valencia.
S.B