La mala suerte apareció con Loris Baz en la primera curva de la carera de Mugello, donde Álvaro Bautista se fue al piso y se llevó con él a Jack Miller y al citado Baz. Mientras que el español y el australiano no sufrieron lesión alguna que lamentar, el galo sí se hizo daño, tanto que se fracturó cuatro dedos del pie derecho. Sólo se salvó el dedo gordo, el pulgar, y hoy fue intervenido en Ginebra de las fracturas del segundo, tercero, cuarto y quinto metatarsiano. El piloto del Avintia Racing de MotoGP le comunicó a su equipo que «la operación fue bien», pero al mismo tiempo no puede aún confirmar si podrá estar presente en la próxima cita, la del GP de Cataluña, dentro de dos fines de semana. De no poder, lo normal es que Ducati vuelva a darle una oportunidad a su probador Michele Pirro.
«La carrera fue increíblemente corta para mí. Hice una buena partida pero había mucho tráfico en el interior y era difícil avanzar en la primera curva, así que decidí ir por la parte exterior pero, de repente, alguien impactó contra mi moto y me fui al suelo», relató el simpático Baz sobre su caída, y añadió: «Desde el primer momento me di cuenta de que me había roto el pie. No se cuánto tardaré en recuperarme porque es una zona complicada. Seguiré las instrucciones del doctor porque no quiero volver antes de tiempo y correr riesgos en las próximas carreras. Más que la carrera, estaré decepcionado si no puedo completar el test después del GP de Cataluña, porque realmente lo necesito».
