Valentino Rossi no olvida, con esa consigna se presentó ante los medios cuando Yamaha presentó la M1, la nueva moto con la que él y Jorge Lorenzo competirán esta temporada. El ‘toque ‘ que tuvo en Sepang con Márquez y su posterior consecuencia no quedo en en el olvido para el italiano que regresará a las pistas con la lección aprendida y ejecutando el plan que tiene ideado.
falta algo más de 50 días para que arranque de nuevo el campeonato de MotoGP la situación está igual como termino en 2015, con los ánimos caldeados. Valentino Rossi se despidió con la sensación de haber perdido un Mundial por culpa de Marc Márquez…y volvió con la misma idea. Además, no es partidario de hablar con el piloto de Cervera porque no lo siente así. Él tiene en mente otro plan para conseguir su undécima corona de la categoría reina.
Pese a que con su compañero de equipo, Jorge Lorenzo, no tiene ningún problema, la relación con él no es buena . Con un un pacto de no agresión fue suficiente para que la escudería japonesa pueda progresar en su intento de reválidar la de mejor equipo en pista, con una moto fiable y rápida, superando a la Honda, la mayor rival hasta la fecha. Su relación con Márquez no son las mejores para el fan y el ídolo. Se sabe que del amor al odio hay un paso, en motociclismo más bien una ‘patada’. El roce de Sepang hizo que del respeto se pasara a la crispación entre ambos y la cosa no parece que vaya para mejor.
“no hay nada que hacer” señaló Rossi a la prensa sobre el tema ‘Márquez’ en la presentación de Yamaha de la M1. El piloto de la eterna sonrisa sí quiso dar un paso para firmar la paz pero Valentino, no parece querer olvidar lo que sucedió.
T.C.