En la madrugada de nuestro país, el medio alemán Auto Motor Sport (AMUS) dio a conocer los primeros renders de lo que serán los vehículos de la Fórmula Uno a partir de la, tan esperada, temporada 2026.
En el articulo, se muestran las primeras imágenes de lo que, según las fuentes, podría ser la nueva reglamentación que la categoría implementará a partir de dicho año. La misma partirá de la base del reglamento actual pero sufrirá algunas modificaciones con el fin de mejorar el espectáculo en pista.
La primera gran diferencia es que la FIA buscará vehículos más compactos y ligeros. Según AMUS, la federación especula una reducción de hasta 30 Kilogramos con respecto a los vehículos actuales. Además, la diferencia entre ejes será limitada e irá desde los 3.600 milímetros actuales a los 3.400 milímetros.
Una de las desventajas que tienen los vehículos actuales es su anchura y, por esa razón, la FIA también trabaja para modificar ese aspecto de cara a la nueva etapa de la Fórmula Uno. Por este motivo, el ancho de los autos se reduciría 10 centímetros, pasando de 2,00 a 1,90 metros.
Además, otro dato de suma importancia, es que los mismos funcionarán con combustibles eléctricos. Un motor eléctrico aporta el 50% de la potencia por lo que deben ser autos resbaladizos para poder ahorrar energía.
Para la generación actual de vehículos se llevó adelante un gran cambio a nivel aerodinámico, convirtiendo tantos los alerones traseros como delanteros en piezas mas simples y, obviamente, el regreso del efecto suelo en búsqueda de una mayor facilidad para la superación. Esto, a pesar de tantos intentos, sigue siendo difícil que suceda por naturalidad y es ese el motivo que lleva a la FIA a buscar nuevas ideas.
Los autos del 2026 contarán con aerodinámica activa: Los alerones delanteros y traseros se podrán colocar planos sobre las rectas. Además, no se descarta que los bordes del difusor también sean móviles. Con esto, se busca garantizar adelantamientos sin la necesidad del DRS (el cual continuará estando).
En el alerón delantero, solo la placa base sobresale del ancho y lleva una pequeña aleta adicional. Por su parte, en el suelo del vehículo habrá dos deflectores escalonados que deben conducir el aire desde atrás al interior.
La cabina se vuelve más delgada y el Halo debería producir menos resistencia al aire. Por otro lado, el alerón trasero estará compuesto por cuatro elementos en lugar de los dos actuales y esto es importante ya que habría que ver cuántos se aplanan al activar el DRS.
Sin lugar a dudas, la F1 sigue buscando la manera de volver a tener sobrepasos naturales y, por lógica, de tener vehículos con una dimensión menor para que el espectáculo pueda volver a ser el que alguna vez supo ser. La pregunta es, ¿funcionará? debemos esperar, como mínimo, 3 años más para saberlo.
