Las pistas rápidas y arenosas de Polonia marcan el comienzo del «festival de la velocidad» del verano en el Campeonato del Mundo de Rally de la FIA. El Rally de Polonia, del 29 de junio al 2 de julio, se celebra justo antes del Rally de Finlandia (27 – 30 de julio), y ambas carreras se caracterizan por sus rápidos tramos que siempre ofrecen imágenes espectaculares.
El rally polaco, octavo de los trece del campeonato, tiene muchas cosas nuevas. Aunque el pintoresco territorio de los lagos de Masuria es un territorio familiar para los pilotos, la mayor parte de la segunda y tercera jornada cuenta con tramos no utilizados hace 12 meses.
La prueba comienza el jueves por la noche con las tradicionales peleas cara a cara en la súper especial Mikolajki Arena junto al parque de asistencia. El tramo de 2.50 kilómetros también cerrará las jornadas del viernes y sábado.
Los tramos del viernes al este de la ciudad son prácticamente idénticos a 2016. Sólo un par de secciones cortas en Wieliczki son nuevas, con cuatro especiales matutinas repetidas por la tarde después de la asistencia intermedia en Mikolajki.
El sábado es el día más largo, con casi 145 kilómetros repartidos en nueve tramos. Los equipos viajarán hacia el norte, cerca de la frontera con el enclave ruso de Kaliningrado y el formato es idéntico al del día anterior. Cuatro especiales que se disputarán dos veces separadas por una asistencia intermedia antes de una última pasada por la súper especial. Pozezdrze y Kruklanki son nuevos, mientras que sólo una sección corta de Baranowo fue conducida en el mismo formato hace 12 meses. El tramo de Goldap más al norte es idéntico al año pasado.
La jornada final del domingo es totalmente nueva en comparación con 2016, con dos bucles en Orzysz y Paprotki totalizando menos de 60 kilómetros. El segundo pase por Paprotki será el Power Stage y otorgará puntos extras a los cinco pilotos más rápidos.
Las 23 especiales sumarán 320.56 kilómetros de un recorrido total de 1408.75 kilómetros.
S.B