El piloto británico Sean Edwards, líder de la Supercopa Porsche, murió en el circuito australiano de Queensland al chocar contra las barreras de protección durante una sesión de entrenamientos privados.
Edwards, de 26 años, viajaba como pasajero en un Porsche 996 que sufrió un choque frontal contra la barrera de neumáticos y se prendió fuego producto del golpe.
El piloto londinense murió en el acto, mientras que el conductor, un australiano de 20 años, se encuentra gravemente herido después de ser atendido por los servicios de emergencia, que tardaron tres horas en rescatarlo del vehículo.
Edwards había ganado este año en las carreras de 24 horas Nurnurgring Alemania y Dubai y actualmente tenía 18 puntos de ventaja en el campeonato Porsche Supercup a falta de dos pruebas para su conclusión.