Después de 103 días, Lewis Hamilton volvió a ponerse a los mandos de un auto de Fórmula 1, este miércoles en Silverstone. El seis veces campeón del mundo regresó al volante junto al equipo Mercedes, donde completó una jornada de trabajo en el circuito británico a bordo del Mercedes W09 de 2018, con el que consiguiera su quinto título mundial.
El británico enfrentó una jornada afectada inicialmente por el frío y el mal tiempo, girando en principio sobre una pista húmeda una vez mejoraron las condiciones, pero con neumáticos de lluvia antes de poder montar Pirelli slicks para piso seco.
Hamilton compartía desde primeras horas de la mañana en sus redes sociales contenido desde el circuito, mostrándose relajado y contento de regresar a su trabajo, después de varios días en los que hizo sentir su voz tras el asesinato de George Floyd en Estados Unidos.
Para Hamilton, el miércoles en Silverstone sirvió como introducción a los protocolos a seguir por parte del personal de la Fórmula 1 en la nueva normalidad que vivirán a partir del inicio de la temporada en julio, en Austria. Todas las escuderías recibieron de la F1 un manual de cerca de 90 páginas con todas las medidas que deben seguir en todo momento durante los fines de semana de carrera y que afectan procedimientos de rutina.
Mercedes tuvo a toda su plana mayor en el circuito durante los dos días de pruebas e incluso simularon los procedimientos de carrera, con miras a llegar lo mejor preparados posible al inicio de la defensa de sus títulos mundiales. «Estuvimos con el equipo de carreras y con los pilotos principalmente viendo cómo prepararnos para correr en Austria, asegurarnos de que todos los procedimientos para prevenir el riesgo de transmitir el virus pueden funcionar sin tener que trabajar en el auto, algo que sí tendremos que hacer en las carreras», explicó Andrew Shovlin, director de ingeniería en pista del equipo.
«Habrán visto mucha gente con barbijos, lo hacemos cada vez que no podemos mantener la distancia de dos metros entre nosotros. Dentro y alrededor del garaje tenemos a todos separados ahora para que haya distanciamiento. Obviamente, la parte difícil es cuando los mecánicos tienen que trabajar en el coche pues ahí es más difícil mantener la distancia. Antes de llegar aquí a todo el equipo de carreras se le hizo el test, en este momento nadie tiene el virus y tenemos confianza en que con estos procedimientos podemos mantener al equipo seguro y ojalá el deporte pueda continuar su curso y cumplir con éxito con las carreras el próximo mes», agregó Shovlin.
Se espera que la escudería Ferrari realice una prueba en los próximos días, pero la mayoría de equipos tendrán su primer contacto con la pista nuevamente en los primeros entrenamientos libres del Gran Premio de Austria.
S.B