Los dueños del Red Bull Ring están presionando con la esperanza de celebrar la primera carrera de la temporada de Fórmula 1 el 5 de julio, siempre que las restricciones europeas de viaje se hayan aliviado a raíz de la pandemia de coronavirus.

Se presentaron una serie de propuestas, incluida la ausencia de público y de medios de comunicación, un aislamiento estricto para el personal de F1 alejado de la comunidad local y pruebas exhaustivas de los que vayan a la carrera. Christian Horner, director de Red Bull, se refirió a los planes del GP de Austria. «Red Bull está totalmente comprometido a hacer que arranque el campeonato. Hicieron un gran esfuerzo para poner en marcha la carrera en Austria», le comentó el ejecutivo a Motorsport.

«Es un circuito propiedad de Red Bull, por lo que obviamente está bajo su control, pero están trabajando con las autoridades locales y el gobierno. Por supuesto, la evaluación, las pruebas y restricciones que se aplicarán serán bastante draconianas, pero si permite que el deporte vuelva, creo que será un plan para que otros circuitos tendrían que seguir», agregó Horner.

El director de Red Bull tiene claro que las carreras a puertas cerradas previstas para el inicio de la temporada no serán eventos normales para ninguno de los participantes. «Creo que cuando empecemos de nuevo, será como crear un grupo reducido de personas, probablemente menos de 80 de cada equipo equipo, y todos tendrán que quedarse en el mismo hotel, todos tendrán que viajar juntos y no podrán interactuar con otros equipos», explicó.

«Por lo tanto, habrá restricciones bastante estrictas. Estoy seguro de que habrá muchas pruebas, muchos test y no interactuaremos con la población local. Creo que habrá procedimientos diseñados para proteger a la mayoría de los competidores, y también tomar las precauciones necesarias para los anfitriones de estas carreras, por lo que no será un formato estándar de Gran Premio, de ninguna manera», reconoció el director de la escudería de las bebidas energéticas.

Aunque algunos siguen dudando que la F1 pueda reanudarse este año, Horner cree que al menos algunas carreras sí se disputarán. «Somos un equipo de carreras y necesitamos un campeonato para competir. Es inimaginable no competir este año, y creo que sería enormemente improbable que no se celebre ningún Gran Premio ni el Mundial», aseguró.

«Se puede ver que en las últimas dos semanas tomó fuerza la idea, tratando de establecer escenarios para tratar de ponerse en marcha. No creo que sea posible un año sin carreras», completó Horner.

S.B

Compartir