Las autoridades del Gran Premio de Azerbaiyán confirmaron que Williams recibirá una indemnización por los daños causados al auto de George Russell cuando golpeó con una tapa de alcantarilla suelta el pasado fin de semana.

El chasis de Russell tuvo que ser devuelto a la fábrica de Williams después de que sufriera un fuerte golpe por parte de una tapa de alcantarilla que se levantó en los primeros minutos de la primera sesión de entrenamientos libres. Tras las reuniones celebradas durante el fin de semana entre Claire Williams, subdirectora del equipo, y los jefes de la F1 de Bakú, se confirmó que el equipo recibirá un pago de seguro lo antes posible.

Arif Rahimov, el promotor del GP de Azerbaiyán, reconoció que estaba presionando para que el asunto se resolviera rápidamente después de disculparse con Williams por lo ocurrido. «Obviamente esto es culpa nuestra, lo admitimos. Es algo que nosotros, como circuito, no deberíamos haber permitido. Comprobamos de nuevo nuestra póliza de seguro y está totalmente cubierta», aseguró.

«Nuestro departamento legal está hablando con el departamento legal de Williams y se les reembolsará en su totalidad. Obviamente no hay resentimientos, ya que ambos entendemos que no fue a propósito. Nos disculpamos sinceramente y también enviamos algunas flores para decir que lamentábamos mucho lo que había pasado», agregó Rahimov.

Mientras que Haas tuvo que esperar casi un año para recibir un pago de Sepang por un incidente similar ocurrido en el Gran Premio de Malasia de 2017, Rahimov está ansioso por que la situación de Williams se resuelva en un plazo mucho más corto. «Hablamos con la compañía de seguros que tenemos que asegurarnos de que esto ocurra lo antes posible, no en un año, porque necesitan este dinero para poder utilizarlo esta temporada. Presionaremos a la compañía de seguros para que acelere el reclamo y pague a Williams lo antes posible», explicó.

El incidente de Russell obligó a cancelar la primera práctica mientras se realizaba una revisión a todas las demás tapas de alcantarillas en la pista, y se establecieron nuevos procedimientos para garantizar que no se repita un incidente similar. «Empezamos a revisar todas las tapas de alcantarillas y todos los desagües dos veces al día: una vez por la tarde después de que terminara la actividad y una vez por la mañana antes de que los autos salieran a la pista», afirmó.

«Tuvimos varios equipos en la pista revisando cada uno de las más de 300 alcantarillas y desagües, así que definitivamente nos lo tomamos más en serio. Definitivamente nos aseguraremos de que esto no vuelva a pasar», concluyó.

S.B

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