El francés Jean Todt fue reelegido para un tercer mandato al frente de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA), durante la Asamblea General de la organización que se celebra en París. Como en su anterior reelección, hace cuatro años, el francés no tuvo ningún candidato rival, a diferencia de lo que sucedió en su primer triunfo, en 2009, cuando superó al finlandés Ari Vatanem.
Ahí Todt sustituyó al británico Max Mosley, cuyo mandato estuvo marcado por la polémica y por el enfrentamiento con las escuderías. Todt supo pacificar la organización, relanzar el campeonato del mundo de resistencia y poner en marcha el de la Fórmula E, con monoplazas eléctricos. A sus 71 años, el francés, apodado en el mundo del motor como «el pequeño Napoleón», también se comprometió en el combate por la seguridad vial, lo que le valió el reconocimiento de la ONU en ese campo.
