El último que quiere sumarse a la moda corriente de correr en el Dakar 2016 es Martin Prokop, el piloto privado por excelencia en los tramos mundialistas, donde compite desde hace ya tres temporadas al volante de un Ford Fiesta WRC gestionado por su propia estructura.
A pesar de no haber probado suerte hasta ahora en los raids, el checo (campeón del Mundo júnior de rallies en 2009), tal vez inspirado por el cambio de aires que emprendieron dos figuras de su especialidad como Hirvonen o Loeb, decidió afrontar también el reto del Dakar.
Prokop abordará dentro de tres meses su primera participación en la prueba sudamericana a los mandos de una Toyota Hilux del equipo Overdrive, el mismo equipo en el que milita el piloto revelación de la pasada edición, el saudita Yazeed Al Rahji.
Quien lamentablemente descartó la posibilidad de competir, es el noruego Peter Solberg, quien tenía la posibilidad de subirse a una Toyota pero fue descartado por una cuestión de tiempo. «Tenía una oferta para el Dakar 2016 pero no creo que hubiera tiempo suficiente para probar el auto. Cuando yo voy a algún lado para competir, no lo hago para maquillar los resultados, yo voy allí para pelear por la victoria», señaló Solberg.
