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Correr de local suele ser una gran ventaja y, a su vez, una gran presión por no querer desentonar. En este 2013, los pilotos argentinos pueden sacar pecho y decir que su saldo fue más que favorable por sus actuaciones y sus resultados finales en el 33° Rally Argentina, quinta fecha del Mundial.
En la clase mayor, Gabriel Pozzo decidió apostar por subirse a un WRC, siendo el único compatriota en esta divisional. El cordobés, con la compañía de Daniel Stillo, fue de menor a mayor, adaptándose tramo a tramo a un Ford Fiesta del M-Sport al que recién pudo subirse en la Práctica Libre del miércoles; situación que le da mayor valor a ese 11° puesto logrado en la clasificación general. «Estoy muy contento. Ojalá pueda tener una continuidad para poner en práctica todo lo que fui aprendiendo. Me siento muy feliz con el rendimiento que obtuve finalizando todas las pruebas y con cumplir el objetivo de completar el recorrido y llegar», destacó el piloto que compite en el Rally Argentino con un Fiat Palio del Solís Competición y que sueña con que éste haya sido su primer paso para tener continuidad y sumarse en otras fechas del Mundial en el futuro. «No es fácil, pero ojalá podamos», comentó.
Por su parte, Marcos Ligato y Juan Carlos Alonso lograron recuperarse a tiempo para cerrar buenas actuaciones, aunque el objetivo de ambos era ganar entre los protagonistas de la Copa de Producción. Los dos se reengancharon tras los problemas sufridos en la etapa del jueves y escalaron en el clasificador de esta divisional para finalizar como segundo y tercero respectivamente, escoltando al ganador Nicolás Fuchs, un piloto peruano que, navegado por el cordobés Fernando Mussano (misma dupla que compite en el Argentino con un Baratec MR), se quedó con un triunfo clave en sus aspiraciones de ir por la corona y que también se metió segundo en el WRC2.
El cordobés Ligato, acompañado por Rubén García, comenzó su actuación ganando el Súper Especial, pero en la PE2 tuvo inconvenientes en el Subaru Impreza que le entregó el equipo italiano Top Run y debió abandonar. Retornó a la competencia merced al sistema Súper Rally y se lo notó inspirado para llegar lo más arriba posible en el clasificador. «Siempre me pasa algo y no sé qué más hacer para ganar en Argentina. A pesar de eso, obtuvimos puntos importantes para el campeonato y logré terminar la jornada manejando con prudencia», destacó el oriundo de Río Ceballos, quien llegaba más motivado que nunca tras vencer en la fecha del Argentino en Corrientes con el Chevrolet Agile MR.
Por su parte, Alonso vivió una situación similar. Con el Mitsubishi Lancer Evo IX del Schroeder Competición sufrió un vuelco en el primer día de la prueba y parecía resignar totalmente sus aspiraciones. Sin embargo, el equipo recuperó el auto y el piloto cordobés radicado en Salta pudo salir a descontar para meterse en el podio y volver a sumar unidades importantes en este programa de participaciones mundiales. «Este resultado sirve para devolverle al equipo algo de todo el esfuerzo que hizo en Agua de Oro para sacar el auto de donde nos caímos. Estar al final de esta extenuante carrera nos pone contentos, pero para nosotros tiene gusto a hazaña. El sueño que comenzamos este año está al alcance de nuestras manos. Ser protagonistas en nuestra categoría era la meta y lo estamos cumpliendo», destacó el campeón de la Clase 3 del Argentino en la temporada pasada.
En el torneo de la Copa de Producción, Fuchs manda con 93 unidades, mientras que Alonso se ubica cuarto (con 33 puntos) y Ligato es quinto (30). La próxima fecha se diputará del 31/5 al 2/6 en Grecia, donde los argentinos buscarán hacerse fuerte de visitantes.