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Néstor Girolami comenzó el fin de semana de la sexta fecha del Stock Car Brasileño en Cascavel, participando de un ensayo reservado sólo para los pilotos que no están entre los primeros 15 del campeonato. Las condiciones climáticas, amenazantes de lluvia desde las 8 de la mañana, hacían que esa tanda de 40 minutos fuera clave para el argentino, ya que es su primera vez en la difícil pista brasileña, la más rápida del campeonato.

El gran secreto a descubrir por Bebu era cómo desenvolverse en la exigente curva Baciao, en bajada, extensa y muy veloz, con una velocidad mínima de 200 km/h y una salida de 230. Esta es la curva más difícil del automovilismo brasileño, no solo por su alta fuerza de gravedad lateral, sino por la peligrosidad en caso de despiste.

Girolami quedó en cuarta posición, a 30/100 de Tiago Camilo, quién marcó el mejor tiempo sobre el final de la tanda, calzando cuatro gomas nuevas para referenciar. Gabriel Casagrande y Julio Campos también calzaron neumáticos 0km en el final de la sesión, en tanto Bebu y el equipo Eisenbahn Racing Team decidieron no hacerlo, y tomar esta tanda como una sesión para que el bicampeón de STC2000 se adapte al circuito, más que trabajar en la puesta a punto.

«Realmente estoy satisfecho. El entrenamiento era más para mí que para el auto. Descubrir a qué velocidad y cómo ingresar a Baciao y a Mergulho, las dos curvas más rápidas y exigentes de Cascavel, era algo que debía tomar con calma. Esta tanda fue ideal para mi, porque me permitió referenciar la pista antes de la práctica oficial. El auto se siente bien», comentó el piloto de Isla Verde, tras bajarse del Peugeot 408 número 63.

S.B