Pirelli confirmo que entregara a los equipos los neumáticos traseros que probó en Montreal para el Gran Premio de Alemania de este fin de semana, con la intención de reaccionar de manera ágil a los múltiples reventones que ocurrieron en Silverstone.
Los nuevos neumáticos, equipados con cinturones de Kevlar en lugar de acero, se usarán a lo largo del fin de semana de Nürburgring para intentar evitar que se repitan las fallas ocurridas en el Gran Premio de Gran Bretaña. En cambio, a partir del Gran Premio de Hungría se unificarán las estructuras que se usaron en el 2012 con los compuestos del 2013.
Mientras tanto, las investigaciones de Pirelli tras la carrera han descubierto cuatro aspectos claves que provocaron lo ocurrido en Silverstone, según la compañía serían el intercambio de los neumáticos del lado izquierdo y traseros, las presiones bajas, ángulos de camber muy pronunciados y los pianos angulosos.
Para el Gran Premio de Alemania, se seguirán usando los neumáticos asimétricos, mientras que el intercambio de los neumáticos estará prohibido durante el evento. Sin embargo, a partir de Hungría, la nueva gama estará compuesta por neumáticos simétricos, lo que significará que ya no serán un problema.
Pirelli también pedio a la FIA que se asegure que se cumpla la estricta normativa de presiones de en el neumático y ángulos de camber en lo que resta de temporada, después de que la compañía haya querido aclarar que su producto es seguro si se opera en unos márgenes recomendados.
El próximo Test de Rookies en Silverstone y dos test adicionales de tres días, en los que la FIA sancionará el uso de maquinaria del 2013, servirá de pruebas extras en pista para Pirelli para afinar sus cambios de cara al Gran Premio de Hungría.